Emprendimiento en tiempos Millennial
Por Luis Alberto Luna Guzmán
Sin lugar a dudas, la palabra “EMPRENDER” es una de las más sonadas de esta década; se ha convertido en una de las principales de nuestro repertorio cultural y sin saber si quiera su significado de fondo, hacemos uso de ella sin conocimiento de causa: en reuniones con amigos, familia y más aun con aquellos a los que pretendemos impresionar, nos despierta curiosidad cuando alguien más la utiliza y hasta nos ofendemos porque nuestro compañero se creé un “sabelotodo” al pronunciarla.
Añadámosle a eso una sociedad en donde una de las generaciones más prometedoras por su fácil acceso a la información y tecnología solo se quedó en un nombre rimbombante “LOS MILLENNIALS”: no sabemos trabajar, nos asustan los compromisos y vivimos bajo estereotipos que solamente nos enseñan que en la vida venimos a disfrutar de cosas tan banales: ¿quién tiene el mejor celular? ¿quién trae la ropa más cara? ¿cómo se llama la chava con miles de likes?
Nos acostumbraron a extender nuestra mano y recibir de aquellos lo que no podemos hacer por nosotros mismos; no estoy diciendo que disfrutar la vida sea malo, sin embargo hay que entender que no todo es color de rosa y si el sentido de la vida fuera hacer memes y estar viendo Facebook todo el día, créanme, no seguiríamos en búsqueda de plenitud; lo que si me queda muy claro es que no estamos tranquilos con nosotros mismos, pero porque? “Tengo muchos seguidores en Instagram, compro lo que quiero, vivo en “independencia” ¿ahora qué?
Hay que entender que emprender no es para cualquiera y si ya estás pensando en hacer un estudio de mercado déjame decirte que por ahí no va la cosa, emprender no está solamente limitado al ambiente de los negocios, es una actitud que nace y despierta la inquietud de hacer algo, desde levantarse temprano para hacer algo de ejercicio antes de ir a la escuela o trabajo, hasta crear algún producto o servicio innovador para ser agente de cambio en los negocios. Lo que quiero que entiendan es que EMPRENDER es vencernos a nosotros mismos, cuántas veces no nos hemos prometido que bajaríamos esos kilitos de más? Que seríamos más puntuales en nuestros compromisos? o que ahorraríamos una cierta cantidad de dinero para algún viaje o placer propio? Emprender es comprometerte y seguir, vencer esos pequeños demonios que se nos presentan ante cada reto, y digo pequeños porque cuántas veces no hemos sentido que nos ahogamos en un vaso de agua?
Es por eso amigos que los invitamos a hacer un poco de conciencia, ¿acaso he caído en mi zona de confort? ¿No voy ni para adelante ni para atrás? Recuerdo un dicho muy famoso de Albert Einstein que dice “No esperes un resultado diferente si sigues haciendo las mismas cosas” Así que la próxima vez que te propongas algo hazlo y créeme que no hay mayor satisfacción que la del deber cumplido. Deja de ver la vida de los demás en las redes sociales y comienza a vivir la tuya. Existe un estudio que se realizó por parte de la Universidad de Cambridge en donde preguntaron a un centenar de personas a punto de fallecer que de que se arrepentían de su vida, la gran mayoría de ellos respondió que no se arrepentían de lo que hicieron, sino de aquellas cosas que no hicieron, así que sal de esa zona que te tiene amarrado, tu puedes ser mejor y si en verdad emprendes veras que el camino es difícil pero el éxito será la recompensa.
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1 Comment
Tal vez una manera para salir de tu zona de confort puede ser saliendo de los brazos de los padres.